martes, 19 de enero de 2016

COLUMNA SIN RODEOS DE LA EDICIÓN 538 DE 28 DE JULIO DE 2015






                 GOBIERNO DEL CAMBIO DOTA DE AUTOS ROBADOS A SUS FUNCIONARIOS
Ahora se conoce el motivo del Secretario de Administración del Gobierno del Cambio Verdadero, Bertín Miranda Villalobos, para declarar que no se comprarían vehículos para los funcionarios, y es que perjudican a los ciudadanos que sufren el robo de sus vehículos, pero, que además tienen que sufrir que sus unidades sean vistas en los puteros a los que los funcionarios son asiduos además de ser usadas como motel y cantina ambulante.
Resulta que hace unos días se informó a la opinión pública sobre el abuso de poder y el influyentísimo en el autodenominado «Gobierno del Cambio»; específicamente del Titular de la Secretaría de Administración, Bertín Miranda Villalobos, quien sacó del bote a su íntimo Víctor Daniel Nájera Cortés (Director General de Administración), por conducir en estado de ebriedad un vehículo Nissan color negro sin placas con reporte de robo y con número de averiguación previa AP-FECORO-I-28845/2014.
Lo anterior sacó a flote que esta práctica es muy común en la Secretaría de Administración y otras dependencias del Gobierno de Tabasco; y que con toda intención de violentar la ley abusando de sus atribuciones, varios funcionarios estatales utilizan vehículos robados para su uso personal. ¿Acaso esto no es un delito? ¿Por qué tanta impunidad? ¿Quién lo permite? 

                                                  OTRA DEL MISMO ASUNTO
Impotencia y coraje, son las palabras que describen el sentir de la señora Rosa Irene Cué García, quien fue víctima del robo de su vehículo en el mes de abril, sin embargo, luego de ser localizada su camioneta, la Fiscalía General del Estado ha puesto constantes trabas para que se le devuelva.
Su molestia y sorpresa fue mayor, ya que según documentos que el mismo Estado exhibió, su camioneta está siendo usada por un funcionario de la dependencia de nombre Pablo Eduardo Ibáñez López supuestamente para realizar diligencias diarias y menesteres laborales.
Cué García señaló sentirse victimizada doblemente, pues luego de que la delincuencia le arrebatara el vehículo que con sacrificios adquirió, ahora la autoridad se beneficia de ello. Además de que le están cobrando un aproximado de cinco mil pesos por concepto de setenta días de resguardo; cosa que se le hace por demás injusta ya que asegura su camioneta no ha estado guardada sino sirviendo de transporte para el empleado antes mencionado.
«No se vale que pasan tres meses y hasta ahora me dicen que me van a dar el vehículo pero, que me lo van a dar hasta la próxima semana. No creo que no tengan para comprarse un vehículo para transportarse, o el gobierno no tenga un vehículo para darles para que ellos desempeñen sus labores; que tengan que utilizar los vehículos de nosotros los ciudadanos» externó la afectada, al tiempo que demandó justicia verdadera para los ciudadanos que diariamente trabajan y se ganan la vida de manera honesta.

Ciudadanos opinan.
Erik Ascencio: Hay una dependencia que se llama Seaba algo de bienes asegurados y tengo entendido que los vehículos que aún no han ido a recoger las personas a las que se los robaron los utilizan las dependencias de gobierno o algo así.
Julio César Rodríguez: Si, pero, tales vehículos son asignados por un consejo General, y se destinan en apoyo a las labores sociales o gubernamentales.
Michael Fels: Exactamente son Unidades que están bajo proceso penal por Robo o narcotráfico y son asegurados y en la ley se establece que se pueden usar para apoyos de las actividades de Gobierno!!
Lorenzo Ruiz: Me estoy apurando a pensar que hasta ellos mismos los pueden mandar a robar para padrotearlos. Nunca se va a acabar la delincuencia en Tabasco porque los delincuentes están en el gobierno del cambio.

                                            DE  FRANKLIN  ESPINOZA  MAY
De nuevo Arturo Núñez Jiménez, inquilino de la Quinta Grijalva y gobernador perredista, se burla del pueblo de Tabasco, mientras en su casa tiene exagerada seguridad, la gente sigue viviendo en un mundo de terror e incertidumbre. El pueblo está harto de tanta violencia y falta de capacidad de sus autoridades.
José Jesús Jiménez: Amigo, sospecho hablas de dolor, primero olvidas que el Sr. Arturo Núñez , es más priista que muchos, es hechura de este partido, ahí nació, se formó, transó y eso era bueno, ahora que les aplicó la misma fórmula es malo, amigo, lo bueno es siempre bueno y lo malo igual siempre malo, estamos abandonados cierto, como es que no se inició con este sexenio, viene desde mucho más atrás, que te parece, desde Salvador Neme Castillo, a quien le tenemos un monumento, en la prolongación del paseo Usumacinta, ¿tenemos memoria?
Toño Flores: Si José Jesús Jiménez, pero, cuando menos había seguridad, empleo si no muy bien pagado pero había, Chavo Neme no traía la escolta que se trae hoy, aquellos, hasta el gobierno del Chelo, saludaban de abrazo al obrero, al campesino, así como al pudiente, hoy ya no, la gente desfilaba en palacio, DIF, y otras instancias de gobierno y se iban con un apoyo o una esperanza, hoy, topan con pared y un rotundo, «no hay dinero», qué ironía, cuando el pueblo ve el derroche que hay en la quinta y demás dependencias.

                                    ALEVOSO  DELEGADO EN LA CNOP
Víctor Hugo Severino es el sinvergüenza supuesto delegado nacional de la CNOP en Tabasco, quien de manera prosaica, soez, vulgar y corriente se expresa de Carlos Alberto Madrazo Becerra como el mayor hampón que ha parido el país, además esta rata coluda más perjudicial que una maldita espiroqueta sifilítica, acusó a la dirigente de los ex braceros Paula Carrillo Pulido de haber destruido las losetas del edificio cenopista y a Enrique Antonio Pech Piña por haber autorizado que hiciera una asamblea en el auditorio de ese edificio y por lo tanto ambos pagarán los daños y además los amenazó de que los va a correr.
Sin embargo, fue su podrida imposición, el tristemente célebre José Dolores Espinoza May, quien todos los días estacionaba su camioneta de doble cabina en ese auditorio, que por cierto fue un trabajo mal hecho en el que nada tienen que ver Paula Carrillo, Enrique Pech o cualquier otra persona.
La honorabilidad de Víctor Hugo Severino es solo una falsa pantalla, ya que solo es un pillo, sinvergüenza, zángano y vividor, al igual que su familia, pues su hijo es de la misma ralea, tanto así que en Veracruz los acusan de tráfico de influencias, robo de plazas, hostigamiento, acosos, presiones, amenazas y otros.  En realidad es una familia de bandidos acostumbrada a actuar como verdaderos forajidos. 

DE LA EXPECTACIÓN A LA DECEPCIÓN DE LAS MASAS





  • Arturo Núñez Jiménez, dos años y medio en palacio

Con el Gobierno del Estado y por ende el control político de Tabasco, el PRD y todos sus coaligados de la elección del 1° de julio del 2012, han dejando mucho que desear en ese reto importantísimo que es su carta de presentación en el debut del ejercicio del poder:
1.- En los dos años y medio que llevan instalados en el gobierno, aún no nos han demostrado que nunca más la simulación y el engaño pasarán y pesarán sobre los tabasqueños.
2.- Si no pueden o simplemente no quieren rescatar el botín tras el proceso penal que se les sigue a algunos de los responsables del gran atraco del último gobierno priísta a las arcas públicas, pues ya que se aboquen a la verdadera reconstrucción del estado porque el tiempo ya está encima.
3.- Urge comenzar a trabajar —ya en serio— en la rehabilitación del gran tejido social que ha quedado bastante lastimado tras la larguísima noche priísta.
Si de aquí a lo que le resta del segundo tercio el PRD gobierno y sus coaligados son capaces de ir cumpliendo esas tres premisas, habrá viabilidad política para el futuro, pero, tal parece que no tienen una propuesta amplia y convincente que les permita ver con claridad al horizonte, sobre todo ahora que las masas han pasado pronto de la expectación a la decepción colectiva.
Treinta meses completitos cumplidos en junio, dos años y medio del gobierno de la alternancia han pasado sin que hasta el momento haya algo distinto que contar. Vamos, ni siquiera un bosquejo claro de cómo ni por dónde pueda Tabasco resurgir de sus cenizas.
El único cambio que aquí se percibe es facial, nuevos rostros han irrumpido a la escena política pero, ningún rastro se nos pinta aun de cómo Tabasco pueda empezar a salir del lodazal en el que lo han dejado los últimos regímenes priístas; al contrario, hoy como ayer se sigue hipotecando el futuro del estado con bárbaros endeudamientos públicos.
Es verdad que el presupuesto anual más que etiquetado ya está comprometidísimo, pero, el estado cuenta también con una recaudación fiscal propia que debe manejarse en caja de cristal, tan transparente como para convertirla en una palanca alterna que ayude a ir saliendo de la gravísima situación en la que se encuentra Tabasco.
Dos años y medio se han ido en un santiamén y la supuesta nueva estructura del gobierno, al margen de los escenarios sumamente adversos que le fueron heredados, le está quedando mucho a deber a los tabasqueños.
Y si eso pasa en el poder Ejecutivo ni qué decir del Legislativo, inmerso nuevamente en la desgraciases de diputados «trapecistas» que sin el más mínimo respeto a su investidura y menos aún a quienes dicen representar, saltan de bancada en bancada como cambiar de calzones.
Denunciar, reclamar, exigir, es lo menos que pueden hacer ahora los políticos desde la oposición y quienes ya están al mando del estado les rebatirán, con toda la razón del mundo, que es inmoral, cínico y perverso pretender que todo se solucione de la noche a la mañana o inconformarse de las cosas que hoy suceden en Tabasco cuando en más de ocho décadas de priísmo tuvieron todo y terminaron haciendo nada más que hundir a la entidad en la peor crisis de su historia.
Pero no todos somos necesariamente priístas, inmorales, cínicos y perversos por denunciar lo que no se está haciendo bien, por reclamar el derecho común de los ciudadanos y exigir resultados del gobierno. Por lo regular, la inmoralidad, el cinismo y la perversidad, están del otro lado con aquellos que todavía no han entendido que el ejercicio noble de la política se transforma en virtud cuando se pone al servicio de los demás, dixit Andrés Manuel López Obrador.
Quienes pagamos puntualmente nuestros impuestos, lo mínimo que esperamos ver del gobierno son resultados constantes y sonantes pues el tiempo apremia. Seis años son nada, la cuenta regresiva sigue su curso.
Así que de antemano rechazamos categóricamente cualquier intento de descalificación, sobre todo ahora que la retórica oficial de la inmoralidad, del cinismo y de la perversidad, es moneda de uso corriente con la que tratan de atajar a las voces discordantes. Si la susceptibilidad se los permite, tienen que entender que en medio de los dimes y diretes de la clase política está la masa que sigue expectante, viendo como han transcurrido estos treinta meses y fracción en Palacio de Gobierno sin que nada relevante (para su recuperación económica y social) suceda.
A muchos nos queda claro que lo de Súper Núñez fue mera ocurrencia de alguien al calor de la contienda electoral del 2012, hoy la realidad nos dice que Núñez Jiménez no es ningún súper hombre que pueda hacerlo todo él solo, para ello se supone que designó en los diversos cargos públicos del organigrama oficial a las hembras y hombres más calificados de Tabasco, todos ellos bajo el escrutinio público y el que ya no dé resultados a estas alturas del gobierno difícilmente lo dará en lo que resta de la administración. De ahí la importancia de los movimientos recientes en el gabinete estatal; cambios y enroques demasiado tarde para unos, apenas a tiempo para otros.
En lo personal (ha quedado constancia en las notas informativas, entrevistas, columnas políticas, análisis y artículos periodísticos que he escrito a lo largo de los años), soy un convencido de la capacidad y del oficio político de Arturo Núñez Jiménez, pero hoy no puedo —junto a la masa expectante— ocultar ese rictus de desencanto ante un arranque vacilante del gobierno («la curva aprendizaje del primer año», le llaman ellos) y todas las pifias en estos 31 meses ya del ejercicio 2013-2018.

  Publicado en la edición 538 de la revista Suceso Político de fecha 28 de Julio de 2015

¿UNA SALIDA POLÍTICA A LA CRISIS DE CREDIBILIDAD DE LA ELECCIÓN Y A LA INEPTITUD EN SEGURIDAD PÚBLICA Y EDUCACIÓN? ¿LLEGÓ LA HORA DEL TLATOANI?




  • La tesis del ¨rompimiento¨

Sergio Demetrio García | Especial Suceso
A diferencia de las especulaciones o de las lecturas entre líneas que los más avezados analistas políticos le hayan dado a la tesis del «rompimiento» de Andrés Manuel López Obrador con el gobierno perredista de Arturo Núñez Jiménez, el tabasqueño común es perspicaz pero, también suspicaz.
—Quién te puede decir a ti, a mí, a todos los que te leemos, si al momento de la llamada a Telereportaje (lunes 29 de junio) desde su rancho en Palenque, Chiapas (ese al que un día el líder nacional de Morena bautizó sarcásticamente como la «La chingada»), a la diestra o siniestra de Amlo no estuviese el mismísimo gobernador de Tabasco -me dice un vecino-.
Tras el comentario, pienso enseguida en el clásico «Todo hecho tiene, por lo menos, tres versiones: la de los amigos, la de los enemigos y la verdadera». Y es así que retomo también algo de lo propio: «El gran problema de México son 0.5% las suspicacias, el «sospechosismo», pues de un sector importante de la sociedad ante ciertas actitudes de la clase gobernante; el resto —99.5 %— es la «hijueputez» política.
—A Morena le fue muy bien en general -dijo en su momento Amlo, tras la jornada comicial del 7 de junio-, pero, hete aquí que a los tabasqueños no nos está yendo nada bien, en materia de seguridad pública, con el General «Moreno» (Audomaro Martínez Zapata). Ni que decir en Educación con otro funcionario «Moreno» (Rodolfo Lara Lagunas), viejo y enfermo, al que tuvieron que sacar de urgencia de la Secretaría porque ya había sufrido un primer infarto.
Y si a esa crisis gubernamental en Seguridad Pública y Educación le sumamos la crisis de credibilidad de un proceso al que la mayoría de los partidos y actores políticos han calificado como una «elección de estado», donde hubo un «fraude generalizado», sí que a don Arturo Núñez le urgía una salida política ya no digamos que convincente pero, si contundente y en ese sentido nadie puede negar la contundencia pero, sobre todo la puntualidad de la llamada de Andrés Manuel a Telereportaje el lunes 29 de junio.
Cuanto más crítica se tornaba la credibilidad de la elección reciente (actualmente en etapa procesal); cuando más cuestionado estaba siendo el gobierno nuñista ante la inconcebible permanencia, contra viento y marea, de Audomaro Martínez en la titularidad de la policía estatal, pese a la ineptitud evidente del ex jefe de escoltas del ex candidato presidencial ¡Zas!, que entra la llamada de Amlo como el as bajo la manga que el nuñismo esperaba. Aunque pueda parecer paradójico, esto y más se puede esperar de la política. Y conste que lo dice mi vecino.
A la voz de «Yo no recomendé a nadie», Audomaro Martínez Zapata y Rodolfo Lara Lagunas —lo que sendos movimientos policiales y magisteriales no lograron antes— ya hoy están en sus casas gracias a la llamada del 29 de junio que «cimbró» la estructura del gobierno nuñista. Y si digo que «cimbró» es porque bastó con un telefonazo de Andrés Manuel para que se diera la salida de altos funcionarios del gobierno estatal que son ampliamente identificados con él pero que no estaban dando los resultados deseados por la población…
Pero, como el vecino perspicaz y suspicaz, quién te puede decir a ti, a mí, a todos los que me leen, si el «rompimiento» Amlo-Núñez no es más que una estratagema para que los tribunales, acostumbrados a jugarle las contras al ex candidato presidencial, dejen las cosas tal cual resultaron de la elección del 7 de junio reciente.

                                                    EL COMPLOT
Y es que si a Morena le fue muy bien en general, como postulara Andrés Manuel, nada más no entiendo cómo es que al mismo tiempo López Obrador salga al paso que, desde Tabasco, Arturo Núñez Jiménez se prestó a un supuesto complot, según esto, orquestado desde Los Pinos por Enrique Peña Nieto para evitar el crecimiento del Movimiento Regeneración Nacional.
Dicho de otra manera, entre el domingo 7 de junio (día de la elección) y lunes 29 de junio (cuando Andrés Manuel habló a Telereportaje para «romper» con Núñez y «cuestionar» a su gobierno), tuvieron que pasar veintidós larguísimos días para que López Obrador terminara convenciéndose, junto al resto de la oposición tabasqueña, de que aquí hubo chanchullo.
Y eso extraña, porque apenas veinte días antes de la elección (lunes 18 de mayo),  Andrés Manuel López Obrador estuvo en Villahermosa para presentar su nuevo libro «El poder en el trópico». En esa oportunidad los reporteros le preguntaron si vislumbraba un rompimiento con el gobernador Arturo Núñez. López Obrador no sólo lo negó sino que sostuvo sus dichos de que Núñez y él son muy amigos.
Aunque sí aprovechó la ocasión para hacerle un llamado al gobernador de Tabasco: —Que deje de aplaudirle a Peña Nieto, porque no se hace nada con la mafia del poder, no hay que juntarse con la mafia del poder, hay que tomar distancia.
«Puedo cuestionar a Arturo (Núñez), pero le tengo más confianza a él, que a Peña Nieto», contestó a alguien que le pidió su opinión sobre las fallas reiteradas del simulacro del PREP en Tabasco…
En el peor de los casos, Juan José Rodríguez Prats tiene su propia visión de la tesis del «rompimiento»: percibe los mismo escenarios que antecedieron a la caída de Salvador Neme (+) en 1992: activismo e intromisión de la familia en los asuntos públicos que sólo competen al jefe del Ejecutivo estatal; enriquecimiento de los amigos del gobernador al amparo del poder; conspiración de actores políticos de diferentes signos partidistas; vergonzosa subordinación de los medios de comunicación a cambio de canonjías.

                                  EN SEPTIEMBRE DEL 2013, YA LO HABÍA SUBRAYADO…
—Importa poco quién pueda suplir en el cargo de secretario de Educación, al profesor Rodolfo Lara Lagunas ni siquiera quién pueda quedar en el lugar que ahora ocupa Audomaro Martínez Zapata como secretario de Seguridad Pública del estado,  lo que de veras debe tener preocupado a don Arturo Núñez son los daños colaterales que para su gobierno desencadenaría una hipotética ruptura con un liderazgo nacional como el que representa el «perredista-frente amplio progresista-moreno», Andrés Manuel López Obrador.
—Y no es ni remotamente porque Amlo pueda tumbar a Núñez de un gobierno que tiene como sustento a la voluntad popular sino por el cuestionamiento mordaz que es capaz de poner en tela de juicio al mismo depositario en turno de la Presidencia de la República, aunque la carrera política de don Arturo, con su ascenso a la gubernatura, haya llegado a tope. (Grijalva, septiembre del 2013).
Casi dos años después, todos hemos sido testigos cómo esa «hipotética ruptura» se tradujo en un «rompimiento» a secas con el consabido «daño colateral» desencadenado en contra del gobierno nuñista. «Daño colateral» porque si ya sus detractores venían señalando a Núñez Jiménez de «mapache», la «andanada» de Amlo lo ascendió a «Mapache Mayor».
Por cierto, que la puntual defensa que el número dos del organigrama oficial hizo de su jefe fue tan débil, carente de sentido por el poco o nulo tacto y contenido políticos, los hizo ver muy pequeñitos ante la opinión pública que se generó tras la llamada del gran Amlo.
Así que «Todo hecho tiene, por lo menos, tres versiones: la de los amigos, la de los enemigos y la verdadera». Incluya usted esta tesis del «rompimiento» como una aportación perspicaz y suspicaz de mi vecino.

                                   ¿LLEGÓ LA HORA DEL TLATOANI?
Se ha dicho que el tercer año de un sexenio —¿La hora de los Tlatoanis mexicas?— marca la consagración del gobierno en turno porque se libera de ciertos intereses creados: arreglos con su predecesor, cualquier otra influencia o atadura política interna o externa.
¿Arturo Núñez Jiménez en el camino de la consagración de su gobierno, libre de cualquier otra influencia o atadura política interna o externa?
Por lo pronto, los cambios más esperados en el gabinete de Núñez Jiménez ya se dieron, faltan los resultados de verdad y el ultimísimo fallo de la elección, que ahora está en manos de los tribunales, para que Tabasco pueda reorientar el rumbo perdido…
Publicado en la edición 538 de la revista Suceso Político de fecha 28 de Julio de 2015